Hoy hemos entrevistado a Irene Mogio, una de las nuevas fisioterapeutas que se han incorporado a Vida’m, sobre la importancia de la fisioterapia prequirúrgica.
La sociedad de hoy en día tiene muy interiorizado el hecho que la intervención quirúrgica de ciertas patologías supone un periodo de rehabilitación posterior para recuperar la máxima funcionalidad. No obstante la fisioterapia preoperatoria continúa siendo una grande desconocida, pero qué es el motivo? Mayoritariamente, la falta de información es el principal motivo de la baja afluencia de población en los centros de fisioterapia para prepararse por una intervención.
Para empezar y meternos en contexto, tenemos que diferenciar el tipo de proceso patológico, si hablamos de las intervenciones quirúrgicas agudas, son aquellas que en el momento en que se produce la lesión se toma la decisión de entrar a quirófano, por lo tanto, no nos da margen a una preparación previa. En cambio, si hablamos de intervenciones quirúrgicas programadas aquí si podemos destacar la importancia del trabajo fisioterapéutico previo a la intervención, comenta Irene.
¿En qué tipo de patologías podemos realizar un trabajo previo a la operación?
La mayoría de patologías se pueden preparar previamente focalizando el trabajo en el grupo muscular o articular afectado, pero entre las más frecuentes encontramos:
- Lesiones de ligamento cruzado anterior o ligamentos colaterales
- Menisco
- Prótesis de rodilla
- Prótesis de cadera
- Patología de hombro (ligamentos, prótesis de húmero…)
- Lesiones de tobillo y pie
- Patología cardiorespiratoria
Los principales objetivos que nos fijaremos en la hora de llevar a cabo fisioterapia preoperatoria es el mantenimiento del rango articular, evitar al máximo lo atrofia muscular para poder conseguir que el paciente llegue con un buen estado físico y la educación del paciente. En el caso de patologías cardiovasculares nos enfocaremos al trabajar los volúmenes y capacidades pulmonares y en la resistencia cardíaca.
En la hora de planificar las sesiones con los pacientes tenemos que tener en cuenta factores como el dolor, la limitación del movimiento, la distribución de la carga y también el estado emocional de la persona, puesto que este punto es muy importante de cara a la adherencia al tratamiento y al enfrentamiento positivo de la intervención.
¿Qué beneficios obtenemos de la fisioterapia preoperatoria?
- Reducir la atrofia muscular y la pérdida de funcionalidad
- Aumentar el rango de movimiento y la elasticidad de los tejidos
- Mejorar la circulación y disminuir el riesgo a sufrir alteraciones postoperatorias.
- Reducir la temporalidad de la recuperación postintervención
- Aumentar las capacidades pulmonares y la resistencia cardiovascular (patologías cardiorespiratorias)
- Mejorar la propiocepción y la percepción del esquema corporal
- Reinserción más rápida del paciente a sus actividades de la vida diaria/laboral/deporte.
- Mejorar el estado psicológico del paciente y reducir la sensación de angustia previa a la intervención
Así que ya lo sabes, si tienes una cirugía programada próximamente, ¡anímate a realizar una buena rehabilitación preoperatoria con nosotros!
